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Universidades bamba: tesis bamba

Lo que nos muestra este nuevo escándalo, que en verdad a nadie sorprende, es que en el Perú la proliferación de universidades-negocio y universidades bamba, han propiciado la emisión masiva de títulos como cancha.

Marco Aurelio Lozano

Publicado: 2022-05-03


“El plagio es la apropiación de una obra ajena haciéndola pasar como propia. Ha existido desde la Antigüedad, y sigue siendo una práctica habitual”

La cita corresponde a un artículo de Alfonso Martín Jiménez, catedrático de Literatura de la Universidad de Valladolid. Esta es una de las primeras referencias que uno encuentra al colocar la palabra “plagio” en el buscador de Google, lo cual hace evidente que en una época donde “todo está en internet”, prácticamente todo se puede copiar y pegar. El plagio como los fake news terminan siendo la perversión del libre acceso a la información, y el robo de uno de los bienes más preciados: la creación intelectual, y en última instancia, el trabajo ajeno.

El plagio en nuestro medio empezó a ganar notoriedad cuando el 2009 uno de nuestros escritores más reputados, Alfredo Bryce Echenique, fue acusado y sancionado por plagiar a quince autores distintos. Aun así, el autor de Un Mundo para Julios recibió tres años después el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances, no sin poca polémica, aunque siempre arropado por la aristocracia limeña a la que bien supo retratar. Otro caso notorio fue el del columnista Guillermo Giacosa, a quien la presión de publicar a diario, lo llevó a copiar textos enteros de diarios y, más acorde con los tiempos de la virtualidad, también de varios blogs y páginas web.

En algún momento el plagio se extendió como una práctica casi normalizada, llegando a tener un candidato presidencial, dueño de una universidad-negocio, acusado de plagiar sus tesis de maestría y doctorado. Además, se apropió de todo un libro escrito por su ex profesor universitario, al cual solo le cambio la carátula y lo presentó como suyo. De haber llegado a la presidencia, Cesar Acuña habría representado el encumbramiento del robo intelectual más descarado, y que ahora es un caso de estudio para paginas especializadas en derechos de autor y defensa de la propiedad intelectual.

Pero como la política actual no puede dejar de ser el resumen de todos nuestros males, ahora tenemos a un presidente y su esposa con serias acusaciones de plagio, justamente para obtener una maestría ¡en la universidad del candidato plagiador!

Lo que nos muestra este nuevo escándalo, que en verdad a nadie sorprende, es que en el Perú la proliferación de universidades-negocio y universidades bamba, han propiciado la emisión masiva de títulos como cancha. Ello supone la aprobación de tesis e investigaciones de muy dudosa calidad académica, lo que incluye pasar por alto la copia burda o el parafraseo sin citar. Y tal como hemos visto en el caso del Ministro de Educación, también acusado de plagio, incluso habría de por medio el arreglo conveniente entre asesores y asesorados, en las universidades públicas.

Llegado a este punto, lo que cabe es seguir defendiendo la reforma universitaria de falsos maestros y doctores que, por un lado, lo único que quieren es seguir lucrando con la educación superior, y por el otro, utilizar la docencia en educación básica como trampolín político-sindical.


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